FECHA DE CADUCIDAD Y PRECAUCIONES DE UN COSMÉTICO

FECHA DE CADUCIDAD

Los champús también tiene su fecha de caducidad y descifrarla es mucho más sencillo que en muchos alimentos.

Desde el 11 de marzo de 2005 los cosméticos llevan en su su etiquetado el plazo de tiempo durante el cual pueden utilizarse sin riesgos después de la apertura. Como no se sabe cuando se va a utilizar el producto, el símbolo de un tarro abierto junto al número de meses y la abreviatura M, indica la fecha de su duración una vez abierta.

​Es muy importante aclarar dos conceptos: el de fecha de caducidad y el de Periodo Después de la Apertura (PAO). ​

Fecha de duración mínima, o lo que comúnmente se llama fecha de caducidad, es la fecha hasta la cual un producto cosmético, conservado en condiciones adecuadas, sigue cumpliendo la función para la cual ha sido concebido y es seguro para la salud humana. En este caso, la fecha de referencia es la fecha de fabricación del producto.

Para los productos cosméticos cuya duración mínima es superior a 30 meses, no es obligatorio indicar dicha fecha de caducidad. En estos casos, la reglamentación de los productos cosméticos obliga a indicar lo que se llama el Periodo después de la Apertura (Période Après Ouverture, PAO) que es la duración durante la cual un producto cosmético, una vez abierto, se puede seguir utilizando sin riesgo para su usuario.

Este PAO se indica con el símbolo de un tarro abierto en cuyo interior se indica un no seguido de, normalmente, una M, lo que corresponde con el número de meses durante los cuales se puede utilizar el producto una vez éste ha sido abierto. Este símbolo debe aparecer tanto en el estuche como en el producto mismo.

Cuando abrimos un producto cosmético, éste está expuesto a agentes externos que podrían deteriorarlo. Este deterioro puede estar unido al efecto de microorganismos o a una degradación físico-química. En función del tipo de packaging utilizado, del tipo de fórmula cosmética, de su composición, de la población a la que está destinado el producto, de la zona del cuerpo donde se va a aplicar el producto el PAO puede variar.

Así, si nos fijamos en el packaging, si utilizamos un aerosol, no es necesario indicar un PAO, ya que en este caso el producto que queda en el recipiente no está expuesto al exterior. Lo mismo sucede si se trata de un producto monodosis.

En cuanto al tipo de fórmula cosmética, no es lo mismo una crema o un maquillaje en crema con un PAO que normalmente será de 12 M, que un rojo de labios o una laca de uñas, los cuales no son susceptibles de contaminarse por microorganismos al no contener agua en su composición, por lo que normalmente tienen PAO de 24 M o incluso no lo indican.

PRECAUCIONES

No ingerir.

Hay escaso peligro de que algún efecto adverso sistémico significativo pueda aparecer tras la ingestión de champú, salvo si una gran cantidad es tragada. De estos productos, la Dosis Letal 50 en ratas está en el rango de 5-15 ml o mg/kg. /peso corporal, convirtiéndoles en ligeramente tóxicos. En el caso de que apareciera una irritación gástrica con náuseas y vómitos, se administrará algo de leche para ayudar a aliviar la mucosa gástrica y diluir el champú. No obstante, ninguno de los ingredientes es significativamente agresivo. ​​

Irritación de la piel.

Reacciones alérgicas. Su uso excesivo puede deteriorar el cuero cabelludo con la aparición consecuente de prurito; no obstante no se suele observar ninguna lesión cutánea. En el caso de que apareciera una reacción alérgica se deberá tratar con la terapia convencional para "hipersensibilidad tópica".

Evitar el contacto con los ojos.

Cierta irritación y prurito, como cuando cae jabón, puede presentarse tras la caída accidental de champú en los ojos, debiéndose enjuagar precoz y abundantemente con agua tibia . Si los ojos han estado expuestos durante un tiempo prolongado a la acción del champú, se corre el riesgo de que se produzca una ligera y temporal conjuntivitis, para la que resultarían útiles unas gotas de colirio oftálmico "calmante" (vasoconstrictor...).

Mantener fuera del alcance de los niños.

Sus atractivos envases, color, olor y forma, puede atraer a los niños a jugar con ellos y hacer un mal uso de ellos.

Cerrar siempre bien la botella para prevenir que entre agua alterándolas propiedades del producto